El anís (Pimpinella anisum) está constituido por las semillas del fruto de una planta herbácea de la familia del perejil. Cada fruto maduro recolectado contiene dos carpelos, cada uno de los cuales presenta una semilla o grano de anís. La semilla es pequeña y curvada, de unos 0.5 cm de longitud y de color pardo grisáceo.
El anís se comercializa en diversas presentaciones, como anís en grano, anís en grano para importación y anís molido, adaptándose a distintos usos en cocina e industria.
El anís se recolecta en los meses de julio, agosto y septiembre.
El anís grano se obtiene de las semillas maduras y secas de Pimpinella anisum. Su característico aroma dulce, intenso y ligeramente especiado se debe a su contenido en anetol, principal compuesto aromático. Este perfil sensorial, junto a su pureza y uniformidad, lo convierte en un ingrediente esencial para formulaciones alimentarias que requieren un aporte aromático natural y estable. Cumple con los estándares de calidad más exigentes, tanto en pureza física como en contenido en aceites esenciales, según las especificaciones establecidas para la industria alimentaria.
El anís grano destinado a importación es seleccionado siguiendo estrictos criterios de calidad: tamaño homogéneo, coloración verde-grisácea característica, bajo porcentaje de materias extrañas y un alto contenido de aceites volátiles. Procedente de cultivos tradicionales y sometido a controles de residuos y contaminantes, se garantiza un producto apto para su utilización directa o para procesos de molienda y envasado. La trazabilidad completa y la conformidad con las regulaciones internacionales permiten una integración segura en líneas de producción a gran escala.
El anís grano molido se presenta como un polvo fino, de color beige claro, que conserva todas las propiedades aromáticas de la semilla entera. Su molienda se realiza bajo condiciones controladas para preservar los aceites esenciales y evitar pérdidas de volátiles. Esta presentación facilita su incorporación directa en mezclas de especias, condimentos preparados, productos de panadería, repostería y bebidas, permitiendo una distribución homogénea del aroma en la formulación final.
El anís grano aporta ventajas diferenciadoras para la industria alimentaria:
El anís grano se emplea en múltiples aplicaciones industriales:
El anís grano, tanto entero como molido, es un ingrediente estratégico para quienes buscan un producto de calidad superior que combine funcionalidad, naturalidad y autenticidad en sus desarrollos alimentarios.
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